Cómo aprovechar ingredientes que tengas en casa para hacer nuevas recetas de ensaladas
- 23 abril 2020
Florette ha recopilado las recetas más divertidas y sorprendentes que han cocinado los fans de las ensaladas durante esta cuarentena para que te sirvan de inspiración en tu próximo plato
Madrid, 23 de abril de 2020. Las ensaladas son unas de las recetas más versátiles. Es suficiente con mezclar una base vegetal –lechuga, canónigo, brotes de espinaca, etc.– con cualquier ingrediente frío o caliente. En un momento como el actual, que para prevenir contagios es aconsejable no salir a la compra a diario, debemos aprovechar los alimentos que cada uno tenga en el frigorífico o la despensa y hacer volar la imaginación. Así, se pueden crear combinaciones deliciosas con ingredientes inesperados. Florette ha recopilado las mejores propuestas que han cocinado los fans de las ensaladas durante esta cuarentena y que te servirán como inspiración para crear nuevos, sorprendentes y saludables platos de ensalada:
- Un clásico que nunca falla. Una opción de elaboración fácil de ensalada es la que mezcla ingredientes que todos tenemos en casa: una lata de atún, tomate y huevos. Basta con cocer los huevos unos 10 minutos –un truco para que queden perfectos es sacarlos de la nevera un tiempo antes de cocinarlos, que estén a temperatura ambiente– y agregarlos junto al atún y el tomate cortado en rodajas a la base vegetal. En este caso, mezclar los ingredientes con la ensalada Gourmet del Chef de Florette hará de tu receta un plato especial. Esta se compone de escarola fina, rúcula, radicchio, espinaca y brotes de lechuga roja que te saciarán con un aporte mínimo de calorías, además de aportar vitaminas A y C para el buen funcionamiento de nuestro organismo. “Si quieres ir un poco más allá en la elaboración puedes añadir algún tipo de legumbre en conserva. Los garbanzos, por ejemplo, son una buena opción. Este ingrediente hace que el plato sea único y nutricionalmente completo”, asegura Miren Aierbe, asesora culinaria de Florette. Para finalizar, puedes añadir una salsa de miel y mostaza, que marida a la perfección con esta mezcla.
- Ensalada con toque crujiente. Los frutos secos, además de ser ricos en fibra y fuente de minerales, aportan a las recetas un toque crujiente que marca la diferencia. Una buena opción es mezclar escarola y canónigos de Florette con aceitunas troceadas, tomates cherry y nueces. Por último, hay que añadir queso en dados, el que más te guste o tengas en el frigorífico: mozzarella, queso fresco o de cabra, por ejemplo. La salsa para acompañar esta receta puedes elegirla al gusto, pero Miren Aierbe aconseja arriesgar con una vinagreta de limón y menta que aportará un toque de frescor a la ensalada.
- Ensalada afrutada. Es temporada de fresas y hay posibilidades más allá de tomarlas como postre o merienda. Y es que esta fruta es una alternativa perfecta para combinar en una ensalada y darle un toque diferente a los sabores de la receta. Para comenzar a innovar, mezcla Primeros Brotes Classics de Florette con aceitunas verdes, tomate de ensalada cortado en dados y pipas de la variedad que tengas en casa. Para completar la receta solo queda agregar las fresas cortadas en láminas que, además de aportar dulzor a la receta, le dará un colorido de lo más apetecible. Mezclar en una ensalada fruta y verdura aporta múltiples beneficios a nuestro cuerpo ya que son ingredientes bajos en calorías con gran cantidad de agua, fibra, vitaminas y minerales.
- Ensalada de mar. Esta receta mezcla vegetales, fruta y pescado, una opción muy completa para incorporar a una dieta equilibrada. Los ingredientes principales son el salmón ahumado, los langostinos cocidos –que pueden sustituirse por gambas– y la piña, que se juntan con la ensalada Mezclum de Florette, compuesta de radicchio, escarola y brotes de espinaca y lechuga roja. Hay que cortar en trozos pequeños el salmón ahumado y mezclarlo con los langostinos enteros y la base vegetal. Después, se añaden pedazos de piña y se finaliza espolvoreando sésamo encima de todos los ingredientes. Si no tenemos sésamo en casa, podemos reemplazarlo por cualquier otro tipo de semilla –chía o lino–, pipas de girasol e, incluso, descartarlo de la receta. Para la salsa, podemos optar por una vinagreta de soja, que marida muy bien con pescados y mariscos. Los brotes tiernos que forman la base vegetal de esta ensalada destacan por su sabor intenso y fresco además de ser ricos en ácido fólico y vitamina C. Además, el salmón es una fuente de proteína de alta calidad que ayuda a mantener en buen estado el funcionamiento de nuestro organismo.
- Ensalada en su tinta. Las ensaladas también pueden ser templadas y esta es solo una de las muchas opciones que hay. Es necesario elaborar por un lado los chipirones en su tinta –cociéndolos en caldo de pescado y añadiendo su propia tinta– y, por otro, cocer arroz blanco que después enfriaremos bajo el agua del grifo. Una vez tengamos los dos ingredientes cocinados, hay que emplatar. En la base pondremos los canónigos de Florette –ricos en hierro y con efectos depurativos–, encima colocamos el arroz y, por último, los chipirones en su tinta. Así obtendremos una receta original, completa y beneficiosa para nuestro cuerpo. Los chipirones se pueden sustituir por calamares e, incluso, por sepia y, en lugar de cocinarlos, puedes optar por las versiones en conserva.
Las mejores mezclas se obtienen probando y arriesgando en la elección de los ingredientes. Ahora es una buena oportunidad para aprovechar los alimentos que tenemos en el frigorífico y la despensa para innovar en nuestras recetas de ensalada. Así, conseguiremos no desperdiciar la comida y descubrir nuevos sabores que seguro nos sorprenden.
Miren Aierbe, Asesora Culinaria de Florette